El viajeros en eviajando.com

Hola amigos:

Les cuento que una colega argentina, Brenda Zaniuk, del blog sobre relatos de viajes eviajado.com, me hizo una entrevista respecto a los viajes que realizo por nuestro país y la difusión que hago en mi blog sobre los diferentes destinos turísticos peruanos. Aquí les dejo el link para que le den un vistazo.

http://www.eviajado.com/general/recorriendo-peru-con-una-mochila-y-un-cuaderno.html

Saludos a todos.

Descubriendo Chimbote

Siempre estuve de paso por Chimbote y nunca me detuve a conocer sus atractivos turísticos. Obviamente, al margen de sus playas como Tortugas, esta ciudad de la provincia del Santa en Ancash cuenta con algunos sitios arqueológicos interesantes que descubrí de regreso de mi viaje por el norte.

Venía con las piernas un poco entumecidas, así que decidí quedarme en Chimbote. Camino a la Plaza de Armas entré a un hostal donde dejé mis cosas. Sin pedírselo, la encargada me sacó unos folletos sobre las Ruinas de San Pedro y el Santuario de Punkuri, y me sugirió que los visitara porque eran lo mejor que tenía ciudad.

La verdad que llamó mi atención porque no tenía idea de que en Chimbote había este tipo de atractivos poco difundidos. Doña Luz, que así se llamaba la administradora del hostal, me dijo que la Huaca de San Pedro está a dos kilómetros de Chimbote partiendo de la Plaza de Armas, donde está la movilidad que te lleva a la zona, aunque también encontré varias agencias de turismo que hacen el recorrido a las ruinas.

En la Huaca de San Pedro destacaba una voluminosa pirámide trunca, construida con adobes paralelepípedos y mortero de barro, que tiene decoraciones con pinturas murales. Según me dijeron esto formaba parte del centro poblado mochica que existió en la zona, cuya población se abastecía de una extensa área cultivada regada por un canal que hasta ahora se mantiene por tramos.

En el lugar, la huaca es el testimonio de la ocupación mochica y de la preponderancia que tuvieron en todo el valle de Lacramarca, antes de avanzar a invadir el valle de Nepeña, que fue el límite sur y definitivo del Estado Mochica, entre los 300 a 700 años d. C.
Al día siguiente fui al Santuario de Punkuri que está a 30 kilómetros de Chimbote. En la esquina de Pardo y Gálvez se ubica el paradero de la línea 40 que me dejó en el pueblo de San Jacinto, precisamente a la entrada, en el distrito de Nepeña.

Este sitio arqueológico, que se dice es el edificio de barro más antiguo de América prehispánica, recién ha sido puesto en valor, pese a que tiene más de 4000 años de antigüedad. Además, tiene una extensión amplia de 1200 m² y forma piramidal escalonada, con plataformas que se comunican mediante escalinatas. En su interior hay motivos ornamentales –cabezas humanas, felinas y dibujos- chavinoides, pero sobre una plataforma más antigua de origen mochica. La verdad existe una mezcla de culturas, pues según explicó el guía hay coincidencias decorativas con los Chavín, la cerámica de tipo andina, así como el arte lítico de Cajamarca o Pacopampa (Chota). Resalta en medio del templo la efigie de la deidad Punkuri, una imagen de felino de grandes colmillos, delante de las gradas principales de este viejo santuario.

Terminé mi vista a estos sitios arqueológicos completamente satisfecho de lo que vi y dispuesto a seguir conociendo nuevos lugares de nuestro país. Solo es cuestión de buscar los destinos más atrayentes y enrumbar a la aventura. ¡Suerte y Felices Fiestas Patrias Perú!

Bosque de Pómac

Hoy escribo sobre el Bosque de Pómac, esa obra de la naturaleza que alberga en sus territorios diversas especies naturales y miles de árboles de algarrobo, pero también una riqueza arqueológica del periodo dominado por la cultura Sicán.

Estuve investigando sobre Pómac porque voy a viajar en unos días para hacer unas fotos por allá. Así encontré que este Santuario es uno de los dos únicos bosques ecuatoriales que tiene el mundo, y que lamentablemente está en peligro de desaparecer. Por esa razón, el Gobierno y las autoridades locales donde se ubica, actualmente realizan un programa de puesta en valor de los recursos turísticos que guardan estas tierras.

El santuario histórico se encuentra en el distrito de Pitipo, provincia de Ferreñafe, en la Región Lambayeque. De la riqueza arqueológica que yace allí, puedo comentarles que se trata de un complejo conformado por 20 pirámides de adobe y barro distribuidas en una superficie de 45 km². Cada pirámide tiene su nombre Botija, Ingenieros, Huaca Loro (El Oro), Merced, Colorada, Abejas, entre otros, y muchas de ellas se confunden entre el bosque.

Paco, un amigo de Lambayeque con el que me contacté por Internet, me dio algunas referencias de este lugar y entre otras cosas me dijo que los Sicán emergieron de la Región Lambayeque a partir de los 750 d.C. y que sus antecedentes son la cultura Mochica. Asimismo, Sicán fue conquistado por los Chimú y absorbido por esta cultura.

Paco es un amante de la historia y es muy conocedor de la cultura de sus ancestros como me dice él. Me recuerda a los nativos de ese documental que alguna vez pasaron en canal 4 sobre el Manú. De su hábitat sé que en 1999 se detectaron 47 especies de aves, siete de mamíferos y nueve de reptiles.

Además, al visitarlo podremos observar el “Arbol milenario”, que es un algarrobo de forma caprichosa muy grande y por supuesto de gran edad, que constituye el símbolo de los algarrobos del país. También se puede conocer el “Mirador de las Salinas” desde donde se puede apreciar el bosque seco con sus pirámides. Este se encuentra aproximadamente a 8 kilómetros del Centro de Interpretación.

Otra zona a visitar es la “Casa Apícola Kart Weiss”, que fue impulsor y primer productor apícola de la Región. Asimismo, la “Huaca Las Ventanas”, que es una pirámide trunca construida a base de adobe y barro de más de 10 metros de altura, que forma parte de un conjunto de más de 20 pirámides.

Por lo visto hay mucho que conocer todavía de nuestro país. Espero que este post los haya animado a visitar este lugar y también a tomar conciencia de las maravillosas cosas con las que contamos y que tenemos que cuidarlas. ¡Suerte a todos¡

Punta Balcones (La media Luna del norte)

Últimamente en la televisión he visto algunos comerciales que de muchas maneras te dicen que hay que disfrutar la vida y las cosas buenas que esta te ofrece. Nuestro país nos brinda muchas de ellas, especialmente sus lugares turísticos como Punta Balcones, una hermosa playa con forma de media luna, ubicada en la provincia de Talara en el departamento de Piura.

La zona es muy peculiar, pues se ubica en el extremo occidental del Perú y de Sudamérica. Es justamente esa saliente que vemos en los mapas de nuestro país.

No conozco personalmente este lugar, pero he oído hablar de él porque forma parte de la oferta variada de atractivos turísticos que ofrece la provincia de Talara. Pedro, un amigo que siempre viaja a Piura por ser de allá, me comentó de su existencia, de sus aguas cristalinas, de sus buenas olas para surfear y de la cantidad de ecuatorianos que van a veranear allí.

Pedro me dice que la zona es hábitat de lobos marinos de todos los tamaños que juguetean y pescan en las aguas de esta linda zona. Además, cuenta que la playa se llama Punta Balcones porque tiene un diseño de balcón hacia el mar, ya que la cresta del cerro es un mirador natural a donde la gente sube para ver la inmensidad del Océano Pacífico.

Llegar a esta playa es sencillo, pues el punto más cercano es el pueblo de Negritos, capital del distrito de La Brea, a un kilómetro de allí pasando por la caleta de pescadores de San Pablo. Esa zona es denominada el promontorio (altura considerable de tierra dentro del mar), que tiene una altura de 80 m.s.n.m., y viven los lobos de mar. Entre la playa Punta Balcones y el faro (Punta Pariñas) se puede observar la forma de media luna que caracteriza a este lugar.

La belleza de Punta Balcones es disfrutada por turistas de todos lados, que llegan a pasar sus fines de semana, especialmente en el verano, y para deleitarse con la belleza del paisaje de la zona y los menús marinos que ofrecen los lugareños.

Costos
El gasto promedio para conocer Punta Balcones oscila entre los 400 y 500 soles incluyendo los pasajes.

Lagunas de Mejía

Hace algunas semanas mi amigo Paul me pidió que le recomendara un lugar dónde hospedarse en Arequipa. Como yo tenía que hacer unas fotos en el Santuario Nacional Lagunas de Mejía, aproveché para conocer el Hotel Natura Inn y recomendárselo a Paul.
Arequipa es una ciudad chévere y tiene innumerables lugares para visitar. Lagunas de Mejía, en la provincia de Islay es uno de ellos. La zona se encuentra a 146 Km. al suroeste de la ciudad Blanca (2 horas y 10 minutos en auto). Este lugar, netamente ecológico, es impresionante por la cantidad de aves que habitan allí. Según los investigadores se puede encontrar 141 especies de las cuales 84 son residentes en la costa peruana y 57, migratorias, es decir, están en esta zona sólo en una determinada época del año, en su afán de escapar del crudo invierno de otras latitudes.
Al visitar este lugar pude ver especies como las garzas blancas, azules, zambullidoras, gaviotas de capucha gris, gaviotas de Franklin y los titanes del vuelo. Me sorprendió ver a un niño que observaba el volar de las especies atentamente y le preguntaba a su padre por sus nombres y de qué se alimentaban.
También habitan otro tipo de especies como el sapo (Bufo limensis) y en las colinas se puede encontrar lagartijas como las Microlophus tigris y el zorro costero que baja de las zonas más altas. ¡Ah!, pero también hay peces como la lisa y el pejerrey.
La zona es visitada por turistas nacionales y extranjeros, así como observadores de aves que escuchan con atención a los guías que describen el hábitat de la zona.
Para conocer completamente Lagunas de Mejía hay que iniciar el recorrido muy temprano, a las 5 de la mañana, para mirar el vuelo de las aves que se levantan a buscar el desayuno. Durante horas, uno puede observar el trajín diario de las especies que habitan allí y disfrutar de la puesta de sol en los días de verano.
Si van a este santuario ecológico, no dejen de visitar el balneario de Mejía, que se ubica a tres kilómetros. Aquí las playas son realmente formidables y no tienen nada que envidiarle a las del extranjero. El pueblo es acogedor y tiene muchas casas de veraneo verdaderamente chéveres. Aquí también hay lugares donde hospedarse, cómodos hoteles y hostales. Se puede aprovechar para visitar Mollendo que está cerca y de paso conocer sus atractivos turísticos.
De regreso a Arequipa almorcé en el restaurante Sol de Mayo que se ubica en la avenida Jerusalén, en Yanahuara. Este lugar me lo recomendó un amigo hace tiempo, pero recién ahora tuve la oportunidad de conocerlo.
De hecho que la comida arequipeña es riquísima, ni que decirlo, pero como la preparan aquí en este restaurante, el deleite es por partida doble. Hay varios platos hechos a base de camarones como las chuletas con su guarnición de verduras, papas sancochadas y su lechuga, una excelente elección. También el conocido coctel de camarones y, por supuesto, uno de las dos variedades de chupes de camarones que ofrece el restaurante.

Pachacámac y chicharrones

Ayer Eduardo, el hijo de mi amiga Ivette, me pidió una opinión sobre unas tomas que hizo en las ruinas de Pachacámac para su clase de fotografía. De pronto vino a mi mente la primera vez que tomé fotos en el mismo lugar cuando mi profesor, cuyo nombre no recuerdo, pero al que decían Gargamel, nos daba las primeras indicaciones para que nuestras fotos salgan bien.

Eduardo me preguntaba por el encuadre, la iluminación y la selección de los paisajes. La verdad, las fotos estaban bien tomadas, especialmente una de ellas en la que se veía en todo su esplendor al santuario de Pachacámac.

Este santuario es un complejo arquitectónico con muchos edificios que fueron construidos en diferentes épocas. Eso lo recuerdo perfectamente, porque mi profesor nos pedía que fotografiemos cada uno de los edificios del lugar.

La historia dice que Pachacámac era el oráculo más consultado del mundo andino, que dejó una profunda huella hasta la llegada de nuestros días.

Por las fotos de Eduardo veo que nada ha cambiado, que las construcciones se mantienen como las conocí, y como supongo las conocieron todos aquellos que han visitado el santuario.

El pueblo de Pachacámac también mantiene el mismo encanto y aspecto provincial, pese a estar a pocos kilómetros al sur de Lima (31 Km.) Uno puede percibir que está cerca al deleitarse con el aroma de los chicharrones que las chicharronerías ofrecen a los visitantes.

Ya cerca al pueblo el paisaje deja su apariencia árida y toma el verdor que representa la vida y una vez en él uno tiene la oportunidad de conocer atractivos lugares. Allí visité el Museo del Pisco y, por supuesto, me bebí varios pisquitos.

También se pueden ver unas botijas españolas que datan del siglo XVI, los alambiques con varias temporadas de uso y la carreta granadera de la época de la guerra con Chile.

La zona goza de buen clima y la ubicación de Pachacámac ha hecho que cada vez más limeños y no limeños la visiten. Vayan que el lindo paisaje y los ricos chicharrones están garantizados.

Costos de viaje

El pasaje a Pachacamac cuesta S/. 2.50 en cualquier combi que se puede abordar en Circunvalación (Lima). Las visitas guiadas al santuario organizadas por la Municipalidad cuestan 10 soles por persona. El precio aumenta a 15 soles si no se cuenta con vehículo.

Caral, la ciudad antigua

Hace unos días que estuve en casa de mi amigo Otto, y mientras esperábamos que empezara la pelea donde nuestra campeona Kina Malpartida retuvo su título mundial, este me mostraba las fotos de su viaje a la Ciudad Sagrada de Caral – Supe, en Barranca, que recientemente había revelado.
Otto me contaba que se fue en su auto con unos amigos a conocer las ruinas de la civilización más antigua de América. El loco como lo llamamos, decía que quedó impresionado con los edificios piramidales que fueron construidos por millones de piedras cortadas y trasladadas a la ciudad.
Me paporreteaba información que había leído y no paraba de hablar: que se formó en el Perú hace 4400 años antes de que gobernaran los incas; que se desarrolló casi simultáneamente con las civilizaciones de Mesopotamia, Egipto, India y China; y que incluso es más antigua que los mayas. A su vez me iba mostrando las fotos de una plaza circular hundida, los espacios de congregación pública masiva y del conjunto residencial entre otras muchas que tenía.
Lo asombroso de esta sociedad, me decía Otto, es que se desarrollaron aislados de las sociedades de América y el Viejo Mundo.
Yo sé que Caral ha sido puesto en valor como destino turístico hace algunos años y la verdad vale la pena ir a conocerla por la importancia que representa como riqueza cultural.
Otto me mostró los catálogos que tenía de Caral y me decía que ellos se fueron hasta el km. 184 de la carretera Panamericana Norte, antes de la ciudad de Supe. Luego recorrieron 23 Km. por la margen izquierda hasta llegar a unas señales que indican el camino hacia Caral. Aunque también dijo que se puede llegar por una carretera afirmada por el km. 160 de la Panamericana Norte y tomar el desvío a Végueta.
Indagando luego me enteré que también se puede llegar con transporte público hasta Supe y una vez allí, tomar un taxi colectivo que nos traslada al Centro Poblado de Caral.
Las ruinas tienen servicio turístico guiado por los propios pobladores de la zona y los fines de semana estos ofrecen a los visitantes los deliciosos platillos locales. Bueno muchachos ya me picó el bichito para conocer Caral más aún que fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco. ¡Hasta pronto!
Gastos promedio para los que tienen automóvil y para quienes no lo tienen
El pasaje hasta Supe está S/. 10, el pasaje de los colectivos S/. 3.50. El ingreso a la Ciudad Sagrada está S/. 11.20 adultos, S/. 3.60 estudiantes superiores y docentes, y S/. 1 escolares y jubilados. El costo del guiado es de S/. 20 por grupos de 20 personas.
También hay paquetes turísticos que incluyen trasporte turístico privado, excursión a los circuitos, guía oficial, ingreso a Caral y almuerzo por S/. 70 adultos y S/. 65 soles escolares.