La huaca del Sol y de la Luna
Por motivos de trabajo volví la semana pasada a la hermosa ciudad de Trujillo y un amigo me pidió que lo acompañe a la Huaca del Sol y de la Luna. Yo visité estos monumentos arqueológicos hace varios años, así que aproveché para hacer algunas fotos con mi cámara digital.
Estas ruinas están a diez kilómetros al sur de la ciudad de Trujillo, aproximadamente 15 minutos de viaje. Uno puede contratar un tour que no solo te lleva a este lugar sino también se incluye en el paseo la playa Huanchaco, Chan Chan y el Complejo arqueológico El Brujo.
También se puede ir por cuenta propia. Abordas un bus local o un taxi que te lleve hasta el lugar y allí compras el boleto de ingreso.
Los Templos del Sol y de la Luna son enormes edificaciones de adobe construidas por los antiguos Mochica en el siglo V. Estos restos arqueológicos están formados por innumerables tumbas y murales polícromos en los cuales se representa a su deidad. En estos murales también se representa escenas de su vida diaria.
Ambos templos se complementaban uno al otro. Según el guía que nos hizo la descripción del lugar, uno era un centro administrativo (Sol) y el otro religioso (Luna). Ambas construcciones están separadas por una explanada de 500 metros, donde se conserva bajo tierra el centro urbano que albergó a la élite moche.
Los mochicas realizaban sacrificios humanos por sus creencias religiosas que estaban muy arraigadas en el pueblo, el cual dependía de las fuerzas del sol, las montañas, el mar, los vientos, los ríos, las lluvias y la tierra para poder vivir. Incluso las personas que fueron sacrificadas eran guerreros profesionales que pertenecían a la misma etnia moche.
Desde 1997 se han hecho muchas modificaciones en las afueras del complejo. Ahora cuentan con un centro de visitantes donde los turistas nacionales y extranjeros pueden descansar antes y después de iniciar el recorrido del monumento arqueológico. En este centro hay cafetería, sala de videos, tienda de recuerdos, mercado de artesanos, entre otros servicios.
También se puede saborear la exquisita comida norteña que ofrecen las ferias gastronómicas de la zona.
Hasta la próxima.
2 Comentários:
Hola Iván:
Está bueno el blog. A ver si te escribes algo sobre la selva que veo que no escribes nada de eso.
Saludos
interesante tus comentarios para ser un visitante aunque hay muchísimo mas que decir de estas obras arquitectónicas.
Saludos y sigue para adelante.
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